Una aplicación web es un software que se ejecuta en el navegador web. Las empresas tienen que intercambiar información y proporcionar servicios de forma remota. Utilizan aplicaciones web para comunicarse con los clientes cuando lo necesiten y de una forma segura. Las funciones más comunes de los sitios web, como los carros de compra, la búsqueda y el filtrado de productos, la mensajería instantánea y los canales de noticias de las redes sociales, tienen el mismo diseño que las aplicaciones web. Le permiten acceder a funcionalidades complejas sin la necesidad de instalar o configurar un software.
¿Cuáles son los beneficios de las aplicaciones web?
Las aplicaciones web tienen muchos beneficios, y casi todas las empresas grandes las utiliza como parte de sus ofertas para usuarios. A continuación se muestran alguno de los beneficios comunes asociados a las aplicaciones web.
Accesibilidad
Las aplicaciones web son accesibles desde todos los navegadores web y desde diferentes dispositivos personales y empresariales. Equipos de diferentes ubicaciones pueden acceder a documentos compartidos, sistemas de administración de contenidos y otros servicios empresariales a través de aplicaciones web basadas en suscripciones.
Desarrollo eficiente
Tal y como se detalló, el proceso de desarrollo para aplicaciones web es relativamente sencillo y rentable para las empresas. Los equipos pequeños pueden lograr ciclos de desarrollo cortos, lo que hace que las aplicaciones web sean una manera eficiente y asequible de desarrollar programas de computación. Además, dado que la misma versión funciona en todos los navegadores y dispositivos modernos, no tendrá que crear un número elevado de iteraciones diferentes para varias plataformas.
Simplicidad para el usuario
Los usuarios no tienen que descargar las aplicaciones web, lo que hace que sean fáciles de acceder a la vez que se prescinde de mantenimiento y capacidad en el disco duro por parte del disco duro. Las aplicaciones web reciben actualizaciones de software y seguridad de manera automática, lo que significa que siempre están actualizadas y presentan menor riesgo de sufrir brechas de seguridad.
Escalabilidad
Las empresas que utilizan aplicaciones web pueden agregar usuarios cuando sea necesario, sin necesidad de infraestructura adicional o hardware costoso. Además, la mayor parte de los datos de las aplicaciones web se almacena en la nube, lo que significa que su empresa no tendrá que invertir en capacidad de almacenamiento adicional para ejecutar aplicaciones web.
¿Cuáles son algunas de las aplicaciones web más comunes?
Hay muchos tipos de aplicaciones web. Estos son algunas de las más comunes.
Aplicaciones web para el trabajo colaborativo
Las aplicaciones web para el trabajo colaborativo permiten a miembros de equipos acceder a documentos, calendarios compartidos, servicios de mensajería instantánea empresarial y otras herramientas empresariales.
Aplicaciones web de comercio electrónico
Las aplicaciones web de comercio electrónico, como Amazon.com, permiten a los usuarios navegar, buscar y pagar productos en línea.
Aplicaciones web de correo electrónico
El uso de aplicaciones web de correo electrónico para acceder al correo electrónico está muy extendido entre empresas y usuarios personales. A menudo, estas aplicaciones incluyen otras herramientas de comunicación, como mensajería instantánea y videoconferencia.
Aplicaciones web de banca en línea
Los usuarios empresariales y personales utilizan con frecuencia aplicaciones web de banca en línea para acceder a sus cuentas y a otros productos financieros, como préstamos e hipotecas.
Documentación técnica
Puede utilizar aplicaciones web para crear y compartir documentación técnica, como manuales de usuario, guías prácticas y especificaciones de dispositivos
¿Cómo funcionan las aplicaciones web?
Las aplicaciones web tienen una arquitectura cliente-servidor. Su código se divide en dos componentes: scripts del lado del cliente y scripts del lado del servidor.
Arquitectura del lado del cliente
El script del lado del cliente se encarga de la funcionalidad de la interfaz de usuario, como los botones y los cuadros con menús desplegables. Cuando el usuario final hace clic en el enlace de la aplicación web, el navegador web carga el script del lado del cliente y renderiza los elementos gráficos y el texto para la interacción del usuario. Por ejemplo, el usuario puede leer contenidos, ver videos o cumplimentar la información de un formulario de contacto. Las acciones como hacer clic en el botón de enviar se dirigen al servidor como una solicitud del cliente.
Arquitectura del lado del servidor
El script del lado del servidor se encarga del procesamiento de datos. El servidor de la aplicación web procesa las solicitudes del cliente y envía una respuesta de vuelta. Las solicitudes suelen ser obtener más datos, editar datos o guardar nuevos datos. Por ejemplo, si el usuario hace clic en el botón Leer más, el servidor de la aplicación web enviará contenido al usuario. Si el usuario hace clic en el botón Enviar, el servidor de la aplicación guardará los datos del usuario en la base de datos. En algunos casos, el servidor completa la solicitud de datos y envía la página HTML completa al cliente. Esto se llama renderizado del lado del servidor.
¿Qué diferencia hay entre una aplicación web y un sitio web?
Cuando se inventó Internet, los sitios web tenían mucha menos funcionalidad que las aplicaciones web. Únicamente podían brindar información a los usuarios a través de contenido estático. Era necesario instalar y ejecutar software con funcionalidad compleja. Las aplicaciones web fueron diseñadas para cubrir el hueco existente entre el software y los sitios estáticos. Contaban con la funcionalidad y elementos de usuario interactivos del software, pero se entregaban mediante una URL de navegador web.
Sin embargo, la tecnología ha evolucionado de manera significativa desde entonces. La mayoría de sitios web modernos son aplicaciones web complejas en cuanto a su diseño.
¿Qué diferencia hay entre una aplicación web y una aplicación nativa?
Una aplicación nativa es un programa de computación que ha sido diseñado de manera específica para un entorno de usuario en particular. Uno de los tipos de aplicaciones nativas más comunes son las aplicaciones móviles, desarrolladas mediante códigos de programación específicos. Al contrario que ocurre con las aplicaciones web, el usuario descarga las aplicaciones nativas o móviles a su dispositivo móvil, normalmente a través de tiendas de aplicaciones. Solo es posible acceder a las aplicaciones nativas en el dispositivo en el que se han descargado, y los usuarios son los responsables de descargar cualquier actualización.
Los desarrolladores tienen que crear diferentes versiones de sus aplicaciones móviles si quieren que estas estén disponibles en diferentes sistemas operativos, como iOS o Android, y así garantizar que tienen el mayor alcance posible. Además, deben asegurarse de que sus aplicaciones móviles se adhieren a los estándares de las tiendas de aplicaciones o, de lo contrario, se arriesgan a que sus aplicaciones sean rechazadas.